sábado, 31 de agosto de 2013

Capitulo 26

Después de que Silvia se quede dormida, las demás vamos a cenar.
No ha tenido ganas de hacer nada desde entonces. Tiene unas pequeñas ojeras debido al cansancio y a las lágrimas derramadas.
Comienza a sonar el teléfono de casa.
-¿Quién lo coge? –pregunto desde la cocina.
Estoy preparando la mesa para cenar. Coloco los vasos.
-Cógelo tú estás más cerca.
Suspiro y cojo el teléfono.
-¿Si?
-¿Cristina? –pregunta alguien al otro lado.
-Si.-respondo confusa- ¿Quién es?
-Soy Max.
Mierda.
Suspiro fuertemente y salgo hacia el salón.
-Hola.-le saludo.
Comienzo a mirar a las chicas y vuelvo los ojos.
Las chicas me preguntan por lo bajo sobre con quien estoy hablando.
-Me preguntaba si te gustaría venir conmigo a una fiesta con unos amigos.
Max. Articulo sin hablar.
-¿Qué quiere? –pregunta Laura riéndose.
Me encojo de hombros.
-¿Cristina estas ahí? –me pregunta Max preocupado.
-Si.-me apresuro a contestar- Perdón.
-No te preocupes. ¿Vendrías?
Rápidamente les explico a las chicas lo que me acaba de preguntar Max. Todas asienten.
-Vale.
-¿Quedamos en la entrada de la universidad?
-Claro, ¿a qué hora?
-En treinta minutos.
-Vale.-cuelgo- ¡No quiero quedar! -pego una patada al aire.
-¿Y para que quedas, tonti? –me pregunta Mayka.
-Para, -me quedo pensando unos segundos- no sé.
-Venga anda. Ve a vestirte juerguista.-Andrea y Rocío me tiran un cojín.
Se los devuelvo, pero no llego a darles.
Entro en mi habitación, oscura y fría. Me acerco a la ventana y compruebo que este cerrada. Lo está. Enciendo la pequeña lámpara de la mesilla de noche, y me acerco al armario.
Me pongo lo de siempre, los vaqueros, una camiseta roja con flores de colorines, la chaqueta de cuero negra y las converse negras.
Me suelto el pelo, y con un par de pequeñas horquillas negras, me quito algunos mechones de la cara. Cojo mi bandolera, meto la cartera y el móvil.
-¿Ya te vas? –me pregunta Laura.
-Sí, voy tarde.
Las chicas se despiden de mí, y con prisas salgo del edificio.
Ando rápido por la calle, son las diez menos algo. Nueve y media. Aquí vivimos un poco más adelantados que en España. Creo que cuando vuelva me encantara volver a cenar a la diez.
Aquí, con las horas y aparte la claridad del día hace que, poco a poco, adelantes tu horario.
Ando, cruzo la calle, canto una canción en mi mente y vuelvo a andar.
Así es como me entretengo antes de llegar a la universidad.
Cuando llego veo a Max sentado en uno de los bancos cercanos a la entrada de la universidad. Tiene las manos en los bolsillos de la chaqueta, lleva un gorro azul puesto y está mirando el suelo.
No le hablo hasta llegar al banco.
-Hola.-digo entrecortada.
El aire entra y sale de mis pulmones de manera rápida.
-Hola, ¿vienes corriendo?
-No.-me rio- Pero mi casa está lejos de aquí.
-¿Por qué no me lo has dicho? Hubiera ido a recogerte.
-No quería molestarte.
-No me molestas Cristina. ¿Vamos? –señala su antiguo coche.
Asiento y le sigo.
Gentilmente me abre la puerta del copiloto y hasta que no me siento y cierra la puerta no se relaja.
Me rio.
-¿Qué te pasa? –me pregunta colocando la llave en el contacto.
-Nada, solo que hacía tiempo que no escuchaba mi nombre.
-¿Y cómo te llaman los demás?-arranca.
-Cristi.-le respondo casi susurrando.
-¿Y ese no es tu nombre?-salimos del parking.
-Sí lo es.-me rio- Pero no mi nombre entero.
-¡Ah bueno! –Quita la vista de la carretera- Perdón entonces.
Comienzo a reírme. Entre los nervios y la incomodez acabo sonriéndole.
-No te disculpes. Me gusta escuchar mi nombre de vez en cuando.
Ambos nos reímos, y así, nos acercamos a un tímido bar.
Me siento extraña.
¿Qué estoy haciendo?
Estoy enamorada de otro chico, y aquí estoy. Con Max, un chico que ni me va ni me viene, apunto de conocer a sus amigos.
¿Y ellos que pensaran? ¿Qué soy su amiga? ¿Su futura “novia”?
¡Dios! ¿Qué estoy haciendo?
Max comienza a andar más rápido y acabo quedándome atrás, junto a la entrada.
El bar no esta muy lleno, hay pequeños grupos de amigos en las mesas.
Este se encuentra en penumbra, lo que provoca que cada mesa consiga tener intimidad. Se escucha a mi espalda una leve campanita que comunica que alguien acaba de entrar al bar. No miro hacia atrás, sigo mirando a Max, sus amigos le dan palmadas en la espalda mientras se ríen. Les acompañan algunas chicas que me imagino que serán sus novias.
-Hola Pitufina.-me dice alguien abrazándome por la espalda.
Me doy la vuelta asustada. Pero me relajo al ver a Harry riendo.
-Hola.-me rio- Me has asustado.
-Ya, lo he sentido. Has pegado un pequeño saltito.
Me rio. Veo a alguien aparecer por detrás de Harry.
-Hola Cristi.-dice divertido.
-Hola Zayn.-digo más cantarina de lo que jamás me hubiera imaginado.
Tanto Harry como Zayn van con las capuchas del abrigo puestas. Hace frio afuera. Comienzo a pensar que han quedado solo para hablar, pero en el momento en el que voy a preguntar, aparecen por detrás Karen con una chica rubia, alta y esbelta.
Me quedo asombrada, y me muerdo la lengua.
-Hola Karen.-la saludo.
Me acerco a ella, y nos damos dos besos en las mejillas.
-Hola Cristi, ¿Cómo estás?
-Bien.-intento responder lo más alegre posible.
-Esta es Taylor.-me dice señalando a su amiga.
Nos damos la mano.
-Encantada.-digo.
Se produce un silencio incomodo del que no sé salir.
-Y –Karen hace una pausa- ¿Qué haces aquí? –noto como se ríe molesta.
Harry y Zayn se rascan la cabeza y miran hacia otro lado.
Alguien me toca el hombro sutilmente. Max.
-¿Vienes? –me pregunta de manera protectora.
-Si claro.-No sé porque extraña razón, le cojo la mano- He quedado.
Max tira un poco de mí, y sin oponer mucha resistencia, le sigo. Miro hacia atrás y, con una sonrisa en la cara, me despido de ellos con la mano.
Taylor…Al final Laura tenía razón. Hay una Taylor.
Qué pena. Es la típica chica que todos quieren.
Perfecta.
-Este es Tom.-dice Max presentándome a sus amigos- Siva, Nathan y…
Del último no me entero. Pero lo saludo igualmente. Después me presenta a sus novias. Parecen normalitas, pero tienen algo que me recuerdan a Karen y Taylor.
¡Ah ya se!
Son perfectas.
Me siento un poco como en fuera de juego. Me estoy comenzando a sentir incomoda. He notado como los chicos se han sentado en una mesa cerca de nosotros, y saber que dos chicas están con ellos y se pueden estar besando y cosas por el estilo, me pone nerviosa.
-Max nos ha hablado mucho de ti.-me dice una de las chicas.
-¡Sí! –afirma la que está más cerca de ¿Siva puede ser? Ni idea- Que si hay una chica en las clases muy guapa…
-Que si tiene estilo propio.-sigue la otra.
-Que si me la…-comienza uno de los chicos. Pero su novia llega justo a tiempo para darle un codazo.
Me rio, son divertidos.
Y así estamos, bromas, bromas y mas bromas. Pero poco a poco, las chicas y sus amigos, me dejan claro que creen que para Max soy algo más. Este no habla, esta colorado y pasando de todos un poco. He notado como ha mirado un par de veces por encima de mí en dirección a los chicos.
A la sexta vez que lo veo mirar, también lo hago yo.
Zayn disimuladamente, estaba mirando por un pequeño hueco que queda entre las dos modelos. Karen se da cuenta de que Max y yo estamos mirándoles y le pregunta algo a Zayn, este niega con la cabeza y comienza a hablar.
Noto como Max se vuelve y comienza a hablar. Le imito y sigo.
Miro mi reloj minutos más tarde. La una menos diez. No me esperaba que fuera tan tarde.
-Max.-me acerco a él- ¿Podemos irnos ya? Me da miedo ir tan de noche por la calle.
-Sí, claro.-ahora le habla a sus amigos- Chicos, nos vemos.-se dan la mano.
Las amables chicas se acercan a mí, y abrazándonos nos despedimos.
Miro disimuladamente hacia la mesa, los chicos ya se han ido.
Max me coge de la mano. No me lo esperaba, pero me imagino que antes a él le pasaría lo mismo por lo que no la aparto.
No me la ha cogido igual que lo hizo Zayn, no entrelaza nuestros dedos. Y por supuesto, no siento lo mismo que cuando él lo hizo.
Cuando nos montamos en el coche, por alguna extraña razón, me pongo tensa.
El beso.
En las películas, cuando una cita acaba, se quedan un rato en el coche y sucede. La pareja se besa.
Pero yo no quiero.
Comienzo a mirar hacia el parque que hay al lado del coche, chicos jóvenes bebiendo y fumando.
-Penoso, ¿verdad?-dice Max arrancando.
-Sí. Me lo he pasado bien con tus amigos.-me apresuro a decirle.
-Pues yo me he muerto de la vergüenza.
Dejamos atrás el bar.
-Ya. Me di cuenta.-me rio- ¿Puedo poner la radio?
-Claro.
Max toca un botón, y comienza a sonar la música. La canción es Antigua.
Love is in the air de John Paul Young.
Ambos nos reimos.
-Bueno…-dice Max cuando llegamos a casa.
-Si.-me quedo en silencio unos segundos- Hasta el lunes.
Voy saliendo del coche.
-¡Feliz Navidad! –Me dice antes de cerrar la puerta- Nos vemos en enero, me dieron ya vacaciones.
Asiento.
-Pues, ¡Feliz navidad!

Y sonriendo, cierro la puerta y subo hacia casa.

5 comentarios:

  1. Hauayajahsjsjskussj me encantaaaa ya so segui gracias por seguirmse........ sube el siguinete raido besso de mariola.

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  2. ¡ME ENCANTA! :D Que ganas de leer el siguiente...Quiero que entre Criti y Zayn pasé algo No se que mas comentarte, porque el capitulo es perfecto. No tardes el subir el siguiente.

    Adiós y muchos besitos <3

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    1. Pronto subire no te preocupes. Y lo referente a Cristi y Zayn...Dudo yo que pase algo enn...
      Besitosssss =)

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  3. ¡LO AMO! Es que es genial el cap. Entre Cristi y Max podría haber algo no es mal chaval, pero Zayn le pega más ehh? Jejeje.
    Besitos :)

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    1. Jajajaja...Gracias por comentar enn!! Y por darme tu opinion sobre el capi, prontito subire.
      Besitosss <3 =)

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=)